Desde AhorraClima queremos ayudarte a que pagues menos por la climatización de tu hogar, y no solo te ofrecemos los equipos de climatización más económicos, sino que también queremos daros algunos consejos para ahorrar tanto en combustible como en la factura de la electricidad, sobre todo ahora que ambas energías se están encareciendo. ¿Empezamos?
El primer paso, la concienciación y la constancia
De nada sirve leer o conocer aquellos métodos de ahorro a la hora de climatizar si después no seguimos al pie de la letra estos consejos, por lo tanto debemos exigirnos el cumplir los consejos de ahorro.
Un truco para cumplirlos, es la concienciación grupal, esto quiere decir, hablar con el resto de habitantes del hogar para seguir estos consejos y recordarnos mutuamente en caso de incumplimiento de dichas acciones. Si el grupo se conciencia, el individuo tendrá más fácil el cumplimiento de los consejos de ahorro, en la unión está la fuerza (y en este caso el ahorro).
Trucos para ahorrar energía en climatización del hogar
Una vez ya estamos concienciados y preparados para ahorrar, vamos a poner en práctica los siguientes trucos y consejos de ahorro energético:
- El correcto aislamiento del hogar: La climatización de los lugares podemos producirla, pero mantenerla es casi más importante, por lo tanto esto será una gran medida de ahorro. El primer paso es hacer una inversión en elementos altamente aislantes y pequeñas reparaciones: por ejemplo, ventanas con sistema de aislamiento, taponar el fondo de una puerta, etc.
- Puertas y ventanas cerradas: Es importante siempre mantener cerradas puertas y ventanas, puesto que climatizar por secciones siempre es más fácil que climatizar de forma global. Por lo tanto debemos tener cuidado a la hora de abrir una puerta o ventana.
- El sol es la mejor calefacción: Si contamos con la suerte de tener un hogar expuesto a la luz del sol durante algunas horas, es importante dejar que este entre a nuestro hogar por cuantos más sitios mejor, por lo tanto, durante el día en las horas de sol, persianas abierta a tope, cortinas abiertas, toldos recogidos, etc… Y cuando el sol deje de incidir sobre nuestra casa hacer todas las acciones al contrario: cerrar persianas, cortinas, etc.
- Utiliza alfombras y suelos sintéticos durante el invierno: Para mantener el calor en nuestro hogar con mayor facilidad, podemos hacer uso de alfombras y otras formas de suelo sintético, de forma que podamos prescindir de ellos en los meses de verano.
- Utiliza los aparatos de climatización de forma intensiva en ciertas franjas del día: Por ejemplo, tener en cuenta las horas en las que el consumo eléctrico es más barato para poner la calefacción, la lavadora o ducharnos, e intentar mantener dicha climatización el resto del día con los trucos anteriores.
- Equipos de acuerdo a tus necesidades: Si contamos con calderas, termos eléctricos o bombas de calor con una capacidad mayor a nuestras necesidades seguramente estaremos gastando más energía de la necesaria. Asegúrate que la potencia y capacidad de estos equipos es la adecuada.
- Busca rendijas y tápalas: Echa un vistazo por la zona a climatizar o por todo el hogar y busca algún tipo de rendija o rejilla que de al exterior y que tal vez no hayamos tenido en cuenta nueva, lo cual puede bajar la temperatura del hogar varios grados. Hay que saber si la rendija se puede tapar indefinidamente o si cumple alguna función vital para el hogar y deberemos de destaparla.
- Tira de ingenio siempre: Por ejemplo, si tenemos una piscina y queremos mantener el calor, poner una cubierta o manta térmica puede ahorrarnos mucha energía que tendríamos con el uso de la bomba de calor de piscina. Podemos usar el sol para calentar agua, ropa, y mucho más. Podemos usar hielo para aumentar la sensación de frio en el hogar, etc. Cualquier truco ingenioso puede valer.
- El termostato y la temperatura es importante: Utilizar aparatos con termostato, y poner una temperatura adecuada es importante, ya que a veces ponemos una climatización muy agresiva cuando tenemos mucho frio o mucho calor, pero realmente lo ideal sería poner una temperatura estándar y esperar un poco a que la temperatura esté regulada.
Si somos realmente eficientes, podemos ahorrar hasta la mitad de nuestro gasto energético, por lo tanto, hay algunas acciones que no requieren de esfuerzo ni de coste, simplemente de constancia y que están al alcance de nuestra mano en nuestro día a a día.