Las bajas temperaturas han llegado de golpe y nos ha pillado desprevenidos, lo que nos obliga a buscar formas alternativas a la calefacción para combatir el frío. En realidad hay muchas formas para luchar contra las consecuencias del frío. La alimentación, la higiene o la vestimenta son algunas de ellas. Si te resistes a poner la calefacción en casa o todavía no la tienes lista, pon atención a los trucos que te damos para sobrellevar las bajas temperaturas.
1. ¿Pies fríos? Ponte un gorro en la cabeza
Sí, sí, como lo oyes. No nos hemos equivocado. Cuando el cuerpo tiene que hacer frente al frío, prioriza mucho antes calentar la cabeza, que es donde se encuentra uno de los órganos más importantes de nuestro cuerpo, antes que las extremidades, como los pies o las manos. Por eso, la próxima vez que tengas frío en los pies y no haya manera de calentarlos, abriga tu cabeza con un gorro.
2. Infusión caliente antes de ir a dormir
Cuando dormimos, la temperatura de nuestro cuerpo baja mucho. Por eso es importante taparnos bien o tomar las medidas necesarias para no pasar frío. Una idea es tomar una infusión bien caliente antes de ir a dormir. Esto permitirá mantener una buena temperatura del cuerpo y descansar mejor.
3. Tomar un baño caliente
Hay veces que no conseguimos calentarnos por muchas capas de ropa que nos pongamos. En esas situaciones en las que el frío «se te ha metido dentro del cuerpo» lo mejor es darse una ducha o baño caliente. Esto permitirá subir la temperatura de nuestro cuerpo durante un buen rato. Pero cuidado, debemos tener el baño bien aislado para que al salir de la ducha, aún mojados, no nos entre el frío otra vez.
4. Alimentos calóricos y de absorción lenta
Otro de los factores que nos pueden ayudar a entrar en calor es nuestra alimentación. Los caldos e infusiones calientes, los alimentos calóricos, que aporten una gran energía, así como aquellos de absorción lenta, como las legumbres o el arroz. Los potajes por ejemplo, son una excelente solución para combatir el frío.
5. Masajea manos y pies
Cuando masajeamos nuestras manos o nuestros pies activamos la circulación en estas zonas y como consecuencia, aumentamos su temperatura. Gestos como frotarse las manos también nos ayudará a calentarnos.
6. Abre y cierra persianas con estrategia
La idea es que mientras el Sol impacte directamente contra las ventanas, lo dejemos entrar, abriendo persianas y cortinas, para dejar que caliente la casa. En cambio, cuando no tengamos ese foco de calor, lo mejor es cerrar persianas para aislar al máximo la temperatura interior.
7. Cierra puertas y aísla la habitación
El hecho de cerrar puertas hace que impidamos el paso del frío hacia la estancia donde estemos. Al compartimentar la casa podemos mantener mejor el calor de la habitación donde nos encontremos y proporcionar un mayor confort. Para aislar mucho más la estancia, podemos utilizar cinta aislante en fisuras y rejillas por donde pudiera colarse el aire frío.
8. Pon alfombras
El suelo es el elemento constructivo de la vivienda que produce una mayor pérdida de calor, especialmente por el mármol, la cerámica e incluso el hormigón. Por ello, las alfombras sirven de aislante y ayudan a conservar el calor.
9. Nuestra vestimenta juega un papel importante
Además de adaptar nuestra ropa a las temperaturas, hay pequeños trucos que nos pueden ayudar a soportar el frío. Por ejemplo, el algodón es más proclive a absorver la humedad que otros materiales, con lo cual la sensación de frío será mayor (por ejemplo, los calcetines de algodón, por muy gruesos que sean, no calentarán igual que unos de nylon). Otra técnica extendida es vestirse como una cebolla, con un montón de capas. Sin embargo, esto podría hacernos sudar y notar más el frío. Por lo tanto, es mucho más efectivo vestirse con una camiseta térmica ajustada y un jersey grueso, por ejemplo.
10. Muévete
Muchas veces nos quedamos quietos y acurrucados ante el frío y es lo peor que podríamos hacer. Ante las bajas temperaturas se recomienda moverse y hacer ejercicio para entrar en calor. Por lo tanto, ante las bajas temperaturas debemos evitar estar sentados o quietos durante mucho tiempo.
Y si ninguno de estos métodos te sirve… Pon la calefacción, que tampoco es para tanto.
Actualmente hay sistemas de calefacción muy eficientes para mantener un buen confort térmico en casa. La opción más recurrida (muchas veces preinstalada en la vivienda) es la caldera de gas combinada con radiadores o suelo térmico. Otra de las opciones son las estufas, y si quieres un gran rendimiento o potencia térmica, recomendamos las estufas de pellets o de leña.
Eso sí, debemos saber utilizar la calefacción de manera moderada y combinarla con los anteriores trucos para reducir nuestra factura energética. Esperamos que estos trucos hayan servido de gran ayuda y compartáis algún otro truco que creáis que falta en esta lista.